En pleno Centro de Sevilla, Calle Águilas conecta la Plaza de la Alfalfa, muy conocida por los que disfrutan de la vida diurna y nocturna de la Capital y con gran historia en sus rincones, bares, terrazas, fachadas…; con la Plaza de Pilatos y la famosa Casa Pilatos y Casa Ducal de Medinaceli. Y continuando Calle Águilas por San Esteban nos encontramos a un minuto de Puerta Carmona y Ronda Capuchinos – María Auxiliadora; en el cruce de Luis Montoto, Calle Recaredos y Avda. Menéndez Pelayo.
Calle Águilas discurre por Sevilla Centro hasta la plaza de la Alfalfa, punto clave para vivir y conocer el Casco Antiguo y algunos de los enclaves cercanos más interesantes de esta zona, como San Ildefonso o la Plaza del Salvador, esta última conocida por su ambiente distendido y sus terrazas como punto de encuentro para el tapeo sevillano. Desde la Plaza de la Alfalfa parten capilares del Centro de Sevilla donde podemos empaparnos de su cultura y encanto, donde elegir entre una oferta gastronómica interminable que va desde la taberna y los bares más típicos y pintorescos, cafeterías, hornos y confiterías, heladerías…; hasta restaurantes de categoría, gastrobares y taperías que, conforme cae la tarde, conecta con una vida nocturna de pubs y locales para todos los gustos.
Alrededor de Calle Águilas se combina la actividad diaria de la Capital con la tranquilidad, encanto y accesibilidad del Centro de Sevilla, y los vecinos de la zona saben perfectamente que vivir en Calle Águilas y en La Alfalfa es una ventaja además de un privilegio, un lugar con todo el arraigo y la belleza del Casco Histórico hispalense, a pocos minutos de los principales puntos clave y de los nudos de transportes del centro y de la ronda urbana.
